Mujeres inmigradas. Encierro de Barcelona.
Las mujeres inmigradas estamos presentes en esta lucha por la regularización de nuestros papeles. Nosotras somos miles de mujeres que trabajamos día a día por nuestra autonomía, contribuyendo con nuestra fuerza de trabajo al desarrollo de este país y al mantenimiento económico de nuestras familias en nuestros países de origen.
Sin embargo, esta sociedad clasista y sexista, nos “ilegaliza” y nos obliga a permanecer en el estatus de las “sin papeles”.
Nosotras decimos que la ilegalidad es violencia, y cara a la migración favorece a las mafias corruptas que nos extorsionan. La ilegalidad nos expone al acoso sexual y limita el derecho a denunciar a los agresores. Nosotras como “ilegalizadas” estamos sometidas a la precariedad laboral y al maltrato físico y psicológico.
“Las sin papeles” somos casi la mitad de la migración, por esto nosotras decimos: ¡Basta! Y tomamos el destino en nuestras manos.
Nosotras no queremos ser cómplices de una sociedad que divide a las personas en ilegales y legales. Las mujeres inmigradas y autóctonas nos hemos encerrado en la iglesia de Sant Pau del Camp, número 101, a fin de que se contemple nuestra especificidad como mujeres frente a la ley de extranjería y en la lucha por la regularización de nuestra situación. Y pedimos qaue en las negociaciones se tengan en cuenta los siguientes puntos:
- Permisos de residencia y trabajo independientemente de nuestro estado civil
- La conservación de los permisos de residencia y trabajo en caso de separación y divorcio
- Que la violación sea admitida como causa para solicitar refugio político
- Que se conceda asilo humanitario a aquellas mujeres que han sido obligadas a casarse en su país de origen
- No etiquetar a las niñas y niños de “ilegales” y someter a las madres a renunciar a su derecho natural de crianza. Por lo tanto solicitamos la reagrupación familiar inmediata. El Estado no puede intervenir en un proceso natural como es la crianza de las hijas e hijos, no respetando el derecho natural de las madres a estar junto a sus hijos.
- Acceder al permiso de residencia a todas aquellas mujeres inmigradas que trabajan en el sector de economía sumergida como las trabajadoras sexuales, domésticas y a domicilio
- Derecho a la asistencia médica independientemente de la situación legal.
- Que se facilite la obtención de permisos de residencia y trabajo y se dé protección a las mujeres que son explotadas laboralmente.
- Denuncia y protección a las niñas inmigradas que son explotadas laboral y sexualmente.
- En caso de violación y/o agresión sexual que se proteja a las mujeres inmigradas, se les otorgue residencia, protección y asistencia, independientemente de su situación legal.
- Que se distingan las demandas laborales particulares y empresariales, exigiendo menos requisitos a los particulares contratantes.
- Derecho a la educación superior al igual que los nacionales e independientemente de su situación legal.
- Efectividad en la homologación de titulaciones.
- Igualdad en el acceso a la vivienda y de las ayudas del Estado.
DENUNCIA
- Exigimos la libre circulación.
- Denunciamos la existencia de determinados profesionales que abusan, extorsionan y se lucran con la situación de indefensión de las personas en situación irregular.
- Denunciamos el excesivo tiempo de espera y los requisitos burocráticos (más de un año después de obtener el permiso de residencia) para que las madres puedan vivir en este país junto a sus hijas e hijos. La subdelegación del Gobierno Civil de Barcelona lleva un año sin tramitar ni resolver expedientes de reagrupación familiar.
- Denunciamos las deportaciones sin tener en cuenta la situación en sus países de orígenes lo que constituye una violación a los derechos humanos.
- Denunciamos la explotación laboral y sexual de las niñas emigradas.